Por: Emerson Jiménez
Montecristi, Rep. Dom. Yaquelin Aybar quien reside o residÃa en el barrio Cristo Rey, entrada la Ramery nos narró con lágrimas en los ojos como perdió todo sus electrodomésticos y su hogar, luego de que un voraz incendio los redujera a cenizas.
La joven Aybar dijo que ella vive de vender ropita y que tuvo que salir a puerto plata a llevar una mercancÃa y que luego el sábado pasado sus familiares de crianza la llamaron para que viniera porque su ranchito se le habÃa quemado , dejándola en
plena calle.
A pesar de todo lo que me ocurrió con la perdida de mi casa que vendiendo ropitas pude pararla, le doy gracias a Dios porque estoy viva, y espero que las autoridades de buen corazón me ayuden a construir nuevamente mi casita, expreso Yaquelin Aybar
Montecristi, Rep. Dom. Yaquelin Aybar quien reside o residÃa en el barrio Cristo Rey, entrada la Ramery nos narró con lágrimas en los ojos como perdió todo sus electrodomésticos y su hogar, luego de que un voraz incendio los redujera a cenizas.
La joven Aybar dijo que ella vive de vender ropita y que tuvo que salir a puerto plata a llevar una mercancÃa y que luego el sábado pasado sus familiares de crianza la llamaron para que viniera porque su ranchito se le habÃa quemado , dejándola en
plena calle.
A pesar de todo lo que me ocurrió con la perdida de mi casa que vendiendo ropitas pude pararla, le doy gracias a Dios porque estoy viva, y espero que las autoridades de buen corazón me ayuden a construir nuevamente mi casita, expreso Yaquelin Aybar
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